lunes, 24 de enero de 2011

Què sonidos son los que oigo yo.

Hoy probè por primera vez en mi vida unos pulques. De apìo era el mìo.
De avena era el del Abuelo.

Todos deberìamos de saber que el lado bueno de las despedidas, puede ser los reencuentros.


Esta semana vamos a tener como huèsped a Gondry.
Un salchicha chillòn que hace pipì por todos lados.
Lo saquè a pasear, le di mi cereal, lo deje dormir conmigo...
Le rasquè la panza y nomàs no deja de llorar.
El Abuelo se lo va a comer en el pasillo de salmonelosis en C.U.