lunes, 13 de junio de 2011

CUANDO ERA ADOLESCENTE ME SENTÍA BIEN COOL

Es una verdadera lástima que ya no tenga a mi Lolita.
Y es todavía una doble lástima que mi mamá se rehuse a comprarme otra.


Pero es cuatromilochoscientos del cuadruple de lástima que sé que como ella no habrá otra igual.


P.D. Mi casa està donde estàs tú.