martes, 20 de enero de 2009

Limpiar mi cuarto produce cierto efeto melancolico. Es como si se desempolvaran todos esos recuerdos.
Los martes durante 15 dias mi mamá descanza, son entonces los martes los dias más cansados. Y son los martes los dias con mas momentos mugrososo desentilichandose.

Hoy entre todos los libros de semestres pasados me encontre veinte pesotes ( uju!! ). Y tambien una paleta de bombones que nunca he abierto ( hasta hoy) y que las hormiguitas se encargaron de comersela.

Esa paletita tiene fech del 6 de marzo del 2007 y me la regalo mi amigo Chuy. En áquella época yo estaba bien enamorada de él.
Fue muy divertida esa experiencia amorosa. Estuvo llena de platicas chistosas, de intercambios de pulsera, de secretos y misterios y de muchos suspiros.
No creo que fuera mi primer gran amor imposible, pero si fue el mas melodramatico.
Me acuerdo que le dedicaba muchas canciones en secreto, de amores dolidos y de mentiras.
El dia que me entere de como era, grite en el estacionamiento de la escuela.
Samantha se rio mucho de eso, pero yo estaba en un charquito de lagrimas.
Hasta que despues se me di cuenta de lo que me paso fue irrepetible y divertido.
Ah, extraño a Chuy, se cambio de escuela.

Me enseño muchas cosas, me presento a todo el monton de amigos que tiene, y vivi a su lado sus apasinados noviasgos.